– La Naturaleza: Monasterio Desierto de San José de las Batuecas / Canchal de las Cabras Pintás – cerca de La Alberca (Parque Natural de Las Batuecas – Sierra de Francia, Salamanca / Castilla-León)
– La Comida: Jamón ibérico español
– La Música: Rob Luft
Bot´s intro
Por el mucho tiempo que dedico a mis clases de guitarra eléctrica, armonía y análisis armónico, en cuanto puedo me escapo para reencontrarme con la naturaleza.
Mis clases online, la guitarra y la música me ocupan casi toda la semana. Mucha pantalla, mucha concentración y, sobre todo, mucho sitio cerrado.
Cuando aparece la oportunidad dejo de lado mis clase presenciales de guitarra eléctrica y análisis armónico en Lavapiés y las clases online, y me sumerjo en mi otra pasión: el senderismo.
No obstante, la guitarra y la música continúan conmigo gracias a aquellos artistas que me acompañan en mis escapadas.
Más info:
https://profesordeguitarraelectrica.com
La Naturaleza
De buena mañana salimos de El Cabaco por la SA-201, atravesamos La Alberca y nos adentramos en el corazón de Las Batuecas.
Es increíble la enorme cantidad de pequeños valles en sucesión, arroyos escondidos, bosquetes y parajes misteriosos que puedes encontrarte en los apenas 14 kilómetros que hay hasta el monasterio.
Es una zona de difícil acceso y haces más de la mitad del camino zigzagueando para salvar una orografía absolutamente alucinante. Puedes pararte a mirar en casi cualquier sitio, porque el espectáculo es un regalo.
Dejamos el coche –en un parking habilitado– a un kilómetro antes del monasterio, al que se llega caminando hasta la puerta… cerrada (es un monasterio de clausura de monjes ermitaños, fundado en el año 1597 por los Carmelitas Descalzos).
Desde allí sale la senda que, bordeándolo por su izquierda, conduce al Canchal de las Cabras Pintás y a la Cascada del Chorro. Forma parte del PR-SA 10 que parte de La Alberca y está jalonado de paneles informativos que hablan de los árboles singulares que van apareciendo.
Iniciamos la ruta atravesando primero el puente sobre el río Batuecas para subir a la otra cara del valle y disfrutar de la vista que ofrece el Mirador de San José… ¡Extraordinaria!
Después seguimos el camino, paralelos al río. Es un espectáculo maravilloso especialmente en época de agua. El río estaba crecido y la vegetación era exuberante.
El recorrido es un deleite para los sentidos: el ruido del agua, los diferentes tonos de verde, la luz, la piedra, el bosque, el cielo, lo que está cerca, lo que está lejos…
Empezamos a subir hacia el Canchal de las Cabras Pintás (una subida delicada tallada en la roca y asistida por una maroma) y empiezan a aparecer los cortados que el río ha creado con el paso del tiempo.
Desde el Canchal las vistas son magníficas.
Protegidas por una reja se encuentran unas pinturas rupestres que se sabe tienen 10.000 años. Se pueden atisbar cabras, peces, siluetas humanas, puntos, rayas y más cosas.
En la zona hay censados unos 20 abrigos con pinturas en excelente estado de conservación.
Antes de llegar a la Cascada del Chorro, un poco más adelante, hay otro abrigo con pinturas, el Canchal del Zarzalón. Nosotros dimos la vuelta en este punto.
La Comida
Como era Navidad, la mayor parte de los sitios estaban cerrados y alguno en el que caímos para un menú tampoco resultó especialmente destacable.
Eso sí, como la temperatura acompañaba, abrigados, hicimos unas cuantas comidas en el campo.
Un día, por casualidad, en ese decorado que es La Alberca, entramos en una jamonería (hay muchas porque se presta a ello la zona y el turisteo) y compramos jamón de tres procedencias diferentes: un cebo de Guijuelo, un pata negra de Huelva y un pata negra de Córdoba.
Un cortador experto, educado y buen conversador nos preparó el manjar.
Cogimos el tesoro y, con un pan excelente que conseguimos en el pueblo, nos fuimos al campo a regalarnos el paladar.
¡NO TENGO PALABRAS!
La Música
La música hasta el Canchal la puso el guitarrista británico ROB LUFT.
Otro joven guitarrista que se mueve en formas de jazz que tienen que ver con el ambient, la electrónica o el afrobeat.
Tiene ya una amplia discografía como sideman y dos discos a su nombre en el prestigioso sello inglés Edition Records.
Colabora con una enorme cantidad de formaciones de jazz moderno de la zona de Londres y trabaja su propia música en diferentes formatos: trío, cuarteto, quinteto.
Excelente compositor y arreglista.
Fue el ganador en 2016 del Kenny Wheeler Prize Of The Royal Academy of Music y segundo premio, también en 2016, en la Montreux Jazz Guitar Competition.
En el vídeo interpreta un tema del bajista y compositor danés Anders Christensen junto a Joe Wright (saxo tenor), Joe Webb (piano y teclados), Tom McCredie (bajo) y Corrie Dick (batería).
¡GRACIAS POR ESTAR AHÍ!